Quizás las circunstancias de obligado "intramuro" ayude al clima de calma, sosiego y asombro que me lleva al reencuentro, siempre a salvo, de la poesía.
MI MEJOR POEMA
Y quizá la belleza
sea solo desconcierto.
(Ana Rossetti)
Me quitó las máscaras y me regaló
el espejo
—donde mirar mi enigma escondido—.
Fue semilla de mi sueño.
Ahora me une al universo,
al instinto en carne viva.
El verso libre que rima con nuestro
amor
tiene un acento de sonrisa
y ritmo de mamífero milagro.
Me paro en sus ojos,
maremoto de luz.
¡¡Por la fiesta en el hogar!!
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ResponderEliminarEse instinto encarnizado yo no lo he podido sentir nunca, pero gracias Silvia por acercarme a presentirlo, porque sí, es esa luz en los ojos que solo las madres pueden ver. Tu compi, María José
ResponderEliminarGracias por escribir aquí, me alegra acercarte una emoción intensa. Sin duda, las palabras nos acerca a otros mundos más etéreos. Un abrazo, querida amiga de Filología. Siempre las clases en Cáceres, en el horizonte.
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